12 de noviembre 2020
La policía australiana descubrió una red de abuso
sexual infantil que trasciende el país y se cuela también por
EE.UU., Canadá, Asia, Europa y Nueva Zelanda, informa Associated
Press.
El desmantelamiento de la red delictiva se hizo
posible gracias a la información que le suministró a los órganos
policiales australianos el Centro Nacional para los Niños
Desaparecidos y Explotados, una organización estadounidense y sin
fines de lucro financiada por la Casa Blanca.
Según el comisario adjunto de la Policía Federal
de Australia, Justine Gough, 16 hombres fueron recientemente
detenidos en los estados de Nueva Gales de Sur, Queensland y
Australia Occidental. Entre los arrestados se encuentran un cuidador
de niños y un entrenador de fútbol escolar. En total, se habrían
dictado 828 cargos por abuso sexual infantil y por la producción y
distribución de materiales que contienen maltrato infantil, así como
por zoofilia, precisó Gough.
Las víctimas identificadas por la policía
australiana tenían entre 16 meses y 15 años de edad. Según aclaró el
subcomisario, la red desenmascarada recurría tanto al Internet
regular como a la llamada Deep Web para publicar los materiales
pedófilos.
''Ningún niño debería ser víctima de abuso y
violencia por parte de aquellos en los que deposita su confianza,
trátese de un miembro de la familia, un cuidador o un entrenador de
fútbol infantil'', resaltó Justine Gough al brindar detalles del
caso.
Entretanto, en EE.UU. arrestaron a otros tres
hombres por delitos similares. La Policía australiana ha remitido ya
18 expedientes relacionados con los detenidos a sus homólogos
norteamericanos. En cuanto a otras regiones (Canadá, Asia, Europa y
Nueva Zelanda) donde podrían esconderse los delincuentes, todavía no
se han reportado detenciones.
No son solo entidades tales como el Centro
Nacional para los Niños Desaparecidos y Explotados las que facilitan
información que contribuye a descubrir las redes donde circula el
contenido abusivo, sostuvo Adam Parks, representante de esa
organización en Australia. También lo hacen las propias empresas de
redes sociales, que regularmente advierten a las respectivas
autoridades de haber dado con algún material abusivo en sus
plataformas, precisó.